El pueblo de Real de Catorce
era una población minera y actualmente es turística ubicada en el corazón de la
sierra de Catorce, en el estado de San Luis Potosí, en el norte de México. Se
encuentra a una altitud de 2750 msnm y la principal vía de acceso es a través
de un túnel de 2300 metros de longitud, inaugurado el 2 de abril de 1901,
denominado Ogarrio en honor al pueblo de España así denominado (Ruesga
(Cantabria) de donde Santos Sainz de la Maza y Ezguerra Zorrilla, Padre de Gregorio
de la Maza y Gómez de la Puente era originario.
«...Se fundó
en el año de 1779 debido al descubrimiento de ricas minas de plata, lo cual
motivó a que una multitud de mineros y aventureros llegaran al lugar en busca
de suerte, desatándose una verdadera fiebre de la plata en medio de condiciones
totalmente desfavorables. El lugar era inaccesible, no existían caminos, no
había agua y los abastecimientos eran difíciles. En sus principios no contaba
con ninguna autoridad que se ocupara realmente de hacer respetar la ley; la
anarquía era total y, como siempre, el fuerte se aprovechaba del débil. A esta
situación le vino a poner fin Silvestre López Portillo, de ascendencia española
y nacido en Guatemala; a él se le debe la fundación del pueblo que en sus
primeros tiempos fue denominado: Real de Minas de Nuestra Señora de la Limpia y
Purísima Concepción de Guadalupe de los Álamos de Catorce. Su desempeño fue
encomiable y se distinguió por su gran experiencia como minero y por su
inflexible determinación…
Como escribe Valerio Montien REAL DE
CATORCE, NIDO DE ÁGUILAS.
Por diferentes motivos no pudimos
viajar antes y planificamos la salida para el sábado sobre las 19:00 de la
tarde. Todo el mundo con el que hablábamos y comentábamos que nos dirigíamos a
Real de Catorce, nos decía que tuviéramos cuidado, que era muy peligroso andar
por esas carreteras cuando cae la noche, etc.
Sinceramente llegué a sentir un poco de preocupación porque fueron
varias las personas que nos advertían.
De tal manera que decidimos no viajar directamente a Real de Catorce y
hacer noche en Matehuala a 83 km. ya que según nos decían no estaban bien
señalizados los desvíos, se nos podía hacer muy tarde hasta llegar y por
supuesto es difícil encontrar cobertura en determinados lugares.
Real de Catorce se encuentra a
poco más de 200 km. al norte de San Luís Potosí. Después de llenar el depósito
con gasolina, por 400 pesos (23€) salimos finalmente sobre las 20:00. La
carretera es autovía hasta Matehuala, sin mayor problema que el estado del pavimento,
muchos baches y una “ruidera” considerable por el simple rozamiento de las
ruedas. Como curiosidad, a unos 70 km.
de San Luis, pasamos por un control antidrogas, la ruta de la droga es hacia el norte intentando llegar
a Estados Unidos, por el que pasamos por un arco de rayos X gigante por donde
pasan todos los vehículo. A las 22:00 ya
estábamos en Matehuala, buscamos un hotel y nos alojamos. Los precios de las
habitaciones eran indistintamente 200 pesos, la individual y la doble. La
señora que nos atendió nos hizo amablemente y por iniciativa propia, un croquis de la ruta a seguir para pasar por
el cajero e ir a cenar y otro para el día siguiente para que nos ubicáramos en
Real de Catorce.
A la mañana siguiente esperando a
mis compañeros, seguí hablando con la señora. Me advirtió una vez más sobre el
peyote y que tuviéramos cuidado si lo consumíamos. Y como no, no pudo faltar la
típica historia. Resumiendo: Una pareja de novios, se adentro en el
desierto para consumir peyote y él acabo matando brutalmente a la chica,
apareció ensangrentado en el pueblo sin recordar nada, diciendo que había visto
al demonio.
Un poco antes de las 8:00 salimos
de Matehuala, en unos 50 minutos y en todo momento siguiendo las señales que sí
había, llegamos a un desvío donde el asfalto se convertía en piedra. Días más tarde, me enteré de que esta
carretera hasta el desvío era la parte peligrosa a partir de que cae la noche,
porque es posible encontrarse con narcos, que te asalten y puedan robarte hasta
el coche. Unos 8 km. de carretera empedrada que obligaba a disminuir
considerablemente la velocidad.
Durante los primeros kilómetros, impresionante
desierto ha izquierda y derecha y unas imponentes montañas al horizonte. A 2
km. del destino la carretera se topa con túnel, solo es de una dirección, por
tanto te cobran 20 pesos (1,17€) para avisar a la otra parte y que no entre
nadie en lo que tu llegas. El recorrido
del túnel ya hace que uno se vaya haciendo una idea del lugar al que se dirige.
Después de aparcar y el
correspondiente pago de otros 20 pesos, nos dirigimos a comer algo sobre las
9:20. En el pueblo apenas están empezando a montar los puestos de souvenirs en
las calles y aun no hay mucho movimiento. Después de almorzar dimos una vuelta
por el pueblo, en un primer momento impresiona la iglesia para un pueblo de
actualmente unos 2.000, pero luego descubres que además existe teatro y plaza
de toros. Todo cobra sentido cuando te cuentan la historia de Real de Catorce y
se calcula que en 1975 tenía una población de 15.000 habitantes.
En los últimos años varias películas
se han localizado en estas calles, The
Mexican, Gore Verbinski (2001) o Bandidas,
Joachim Ronning (2006) han traido a los hoteles del pueblo huéspedes como
Brad Pitt, Julia Roberts, Gene Hackman, Penélope Cruz, Salma Hayek.
Una de las cosas que nos dijeron
que no podíamos dejar escapar era subir a los “Willis”. Que no es otra cosa que
dar una vuelta por la zona con unos vehículos 4x4 que funcionan desde los años
50, que deben su nombre a su creador.
Gracias a su agilidad, versatilidad,
tracción en terreno embarrado, pantanoso o helado, robustez y resistencia a las
peores condiciones climatológicas, tuvo múltiples utilidades. Sirvió como
ambulancia, como coche de mando y exploración con una ametralladora Browning en
su caja trasera, como soporte de lanzacohetes y morteros, como camión de
bomberos en portaaviones, como remolcador de piezas de artillería, vehículo de
control aéreo en aeródromos, vehículo base para tropas paracaidistas, portando
cable telefónico, con seis ruedas para patrullaje de la Guardia Costera etc.
Además, en el teatro de
operaciones de Birmania fue adaptado como locomotora, y el SAS británico lo
utilizó en sustitución de sus iníciales camiones en el norte de áfrica y
posteriormente en Francia como vehículo de asalto para atacar bases y convoyes
armándolo con ametralladoras antiaéreas. Posteriormente, en 1942 se produjo una
versión anfibia. Si bien, de menos éxito que su hermano mayor, fue bastante
útil para los soviéticos.
Después de dos horas explorando
los alrededores y de otra paradita para comer algo. Completamos el día con una
ruta a caballo por las minas y el pueblo fantasma, cercano a Real de Catorce y que murió cuando
cesó el abastecimiento de agua debido a un desvío del canal. En una de las
minas, el guía nos mostro la impresionante profundidad del tiro lanzando una roca al vacio. Pudimos contar más
de 10 segundos hasta que dejamos de escuchar el retumbar de la piedra haciéndose
añicos al ir cayendo y golpeando contra las paredes. El señor nos aseguró que
la profundidad era de unos 960 metros, repleta de galerías adyacentes creando
un auténtico laberinto.
Con las historias y anécdotas
sobre el pueblo, era imposible no transportarse momentáneamente a un western, cabalgando por aquellos parajes
y disfrutando de semejantes vistas.
más información: www.realdecatorce.net/
